POR ESTEBAN MORALES.
Resulta que hace algún tiempo retiramos de su cargo al Ministro de Economía, para que el Cro. Que ocupaba la responsabilidad de la Dirección de la implantación del nuevo modelo económico tuviera en su mano ambas tareas.
Ahora es a la inversa; quitamos al Cro. Murillo de ministro, para que se quede solo con la tarea de implantar el nuevo modelo y dirigir la Comisión. Es posible que nos hayamos percatado de que la tarea de implantar el nuevo modelo sea demasiado fuerte para que el hombre encargado, además, tenga la responsabilidad de ser ministro de economía.
Pero lo que me resulta imposible de entender, a no ser que causas mayores lo justifiquen, que el hombre que durante todos estos años ha tenido sobre sus hombros la imagen económico-financiera internacional de Cuba, Ricardo Cabrisas, haya sido movido de su responsabilidad para darle el cargo de Ministro de Economía.
Me pregunto, porque en medio de la situación tan compleja que tiene Cuba en el campo de sus relaciones económicas internacionales, movemos del cargo al hombre que ha manejado la deuda de Cuba, sus relaciones económicas con el Club de Paris y ha realizado todas las gestiones para que más de 14 países de la institución mencionada, hayan negociado con Cuba; haya logrado trabajar para todas las condonaciones de deuda que hemos recibido, que no son ningún regalo, logrado los préstamos que se nos han otorgado; haya realizado todas las gestiones que ha hecho para aliviar nuestra situación financiera. Al hombre que posee las relaciones con la banca internacional más sólidas, que ha negociado los acuerdos más complejos con el aparato financiero internacional, que tiene el prestigio y las relaciones de Cuba en el campo más difícil de la economía del país. Lo quitamos y lo ponemos de Ministro de economía. Al hombre que goza del crédito más importante en el campo financiero internacional: la confianza. Cuando en Cuba, en mi opinión existen no menos de entre 2 o 3 personas que podrían ser ministros de economía, mientras que no existe nadie que pueda ocupar el cargo que Cabrisas ocupaba con la capacidad, habilidad y relaciones con que él podía hacerlo.
Yo diría, que Cabrisas ha llegado a ser, casi, el Carlos Rafael que ya no tenemos. Mientras que ministros de economía pueden ser otros.
Cabrisas ya no es un hombre joven, tiene 79 años, pero estoy seguro que le alcanzarían más las fuerzas para llevar adelante la tarea que venía haciendo de manera brillante, que para ponerlo al frente del Ministerio de Economía; la economía interna, "ese gran almacén", con no mucho que repartir. El Cro. Cabrisas nunca ha tenido nada que ver con la economía interna, ni con los balances, ni con los problemas de acopio, las ineficiencias de la agricultura, el turismo, y mucho menos con los problemas ya históricos de la Cadena Puerto-Transporte-Economía Interna. Queremos consumirle los años vitales que le quedan, cuando para lo otro que hacia las fuerzas le alcanzarían mucho mejor. Además de que no creo que tengamos un hombre o mujer más capaz que él para manejar lo que ha estado haciendo hasta ahora.
Nos hemos dado cuenta que movemos de un puesto clave a un hombre que lo ha hecho muy bien, en una posición que es de vida o muerte para nuestra economía ahora. Con una situación tan inestable frente a los intentos de eliminar el bloqueo como ahora. Sin aun poder manejar el dólar a nivel internacional.
Además, me pregunto, cuando vamos a acabar de dar la orden de jugárnosla con los jóvenes. Existen varias provincias, donde su primer Secretario del Partido podría ser ministro de economía. O algunos economistas, jóvenes, preparados, con fuerza para dirigir la economía. Como podría ser, por ejemplo, Juan Triana.
Considero que se trata de una decisión errónea, que podemos pagar caro. A no ser que causas mayores, que desconocemos, hayan justificado la medida. Y esto pueda parecer una autosuficiencia de mi parte.
Hay muchas cosas importantes para la economía cubana ahora. Pero obtener préstamos, recibir inversiones, cumplir los compromisos de las condonaciones de deudas y tener dinero fresco, es cuestión de vida o muerte hoy para nuestra economía. Sí queremos de verdad aplicar el Nuevo Modelo Económico con éxito.
Julio 17 del 2016.
Agradezco la colaboración de Ismael Zuaznabar
No hay comentarios:
Publicar un comentario